"Quiero más una libertad peligrosa que una servidumbre tranquila" MARIANO MORENO

“La libertad de expresión es como la salud: cuando falta se da cuenta uno de lo que perdió. Sin ella, el ser humano pierde la dignidad como tal. Por lo tanto, todos debemos luchar para conservarla y pasarla a nuestros hijos, como la mejor herencia" AURELIO NICOLELLA

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LA PROLETARIZACION DE LAS PROFESIONES LIBERALES

Por Aurelio Nicolella
 
El médico peruano Carlos Mario Ozcuna Yerta, galeno desde hace quince años, habiendo trabajado como tal en el Hospital Nacional Dos de Mayo de Lima, se vio obligado a emigrar hace un par de años a la gran metrópoli del Río de la Plata. Cuando llego a Buenos Aires pensó que podría ejercer libremente y con dedicación profesional el arte de curar, que tanto le costo viniendo él de las barriadas mas pobres de las sierras barrosas de la ciudad de los virreyes.
Poco a poco se fue dando cuenta que el plan siniestro de eliminación de las profesiones liberales también en forma menos drásticas que en su Perú natal se estaba dando por estos lares. Pudo comprobar como los galenos argentinos, los que otrora eran admirados por su talento, preparación, admiración y empeño profesional hoy estaban reducidos a ser profesionales proletariados, trabajar horas en guardias de hospitales, clínicas, consultorios ambulantes tanto municipales como provinciales para poder sacar un magro e indigno sueldo a cambio de resignar tiempo a seguir estudiando y perfeccionándose en su arte.
Ver la facultades que todo estudiante latinoamericano soñó con ir a estudiar o perfeccionarse ser tomadas por sus propios alumnos convirtiéndose dichas casas de altos estudios en romerías perdiendo la magnificencia sagrada del saber. Carlos Mario Ozcuna Yerta pudo comprobar en persona que el mismo patrón de degradación se esta dando en toda Latinoamérica incluso en la París sudamericana, la culta Buenos Aires.
El plan orquestado a nivel continental en donde lo primario es tratar por todos los medios que el acceso a la educación sea deficiente y magro con el fin de poder dominar a las masas esta siendo ejecutado con optimo éxito por los poderes centrales de dominación, todos sabemos a esta altura que dicho poder no se halla ni en la Casa Blanca ni en el Pentago, sino en los centros mundiales de poder.
La educación que da conocimiento, puliendo al ser humano, haciéndolo pensar es un enemigo para el nuevo orden mundial que se ha establecido desde hace años en la macropolítica mundial, hoy es necesario seudo-democracias fantoches cuyos gobernantes puedan ser manipulados por ese mismo poder central, en donde solo el quince por ciento de la población de un país domine al otro ochenta y cinco por ciento, en resumen como dice el abogado y pensador brasileño Gilberto Ríos Dilma “…la eliminación de la clase media…”, y precisamente las profesiones liberales son clase media por naturaleza, entonces que mejor que proletarizar dichas actividades que son molestas, como hacerlo obligando a que para su sustento y el de su grupo primario tengan que trabajar hasta el cansancio, y así vemos como un médico que años antes se especializo en cardiología termina también realizando guardias en clínicas o hospitales suburbanos para poder arrimar algunos billetes mas a su economía familiar, quitándole con ello horas al descanso físico y al perfeccionamiento de su profesión, así cada día será menos médico y el servicio de salud que deberá dar a sus semejantes terminara siendo defectuoso. Total el quince por ciento dominante tendrá acceso a la medicina exclusiva “vip”.
El ataque sistemático a los cuatros pilares de la sociedad, seguridad, justicia, educación y salud son así sometidos a una degradación paulatina con un fin lógico, la entera dominación de las masas como dijimos. Sin salud, sin seguridad, sin justicia y sin educación una sociedad cae en el vacío. La anarquía se apodera de la sociedad y esto beneficia a los centros de poder. August Salvat Denier, sociólogo francés supo definir en la década del sesenta que “…La masa pensante es un peligro para el “establishment”, la no pensante una bendición…”.
Desde ya que ningún político se atreve a ir en su contra de dicho postulado nefasto, hoy se necesitan abogados, docentes, odontólogos, arquitectos, ingenieros, médicos todos ellos proletarios, que se los pueda oprimir, para que no tengan tiempo de pensar, decidir su futuro o analizar su entorno, teniéndolos ocupados en su sustento no estarán preocupados en realizar revoluciones.
Un ejemplo basta, una justicia no creíble hará que la gente no litigue y no quiera hacer valer sus derechos, con lo cual los abogados deberán migrar a realizar otras tareas para su sostén, tareas por la cual no han sido preparados, embargándole una gran frustración en la fibra mas intima de su ser y ya sabemos que un hombre frustrado a la larga es un cadáver viviente o una persona sin escrúpulos.
Un caso común y conocido en el mundo acaeció en Alemania, un país central, la primera potencia de Europa, hace años el entonces canciller Gerhard Schöder propuso desde su gobierno que se tratara la reducción de horas de trabajo de cuarenta semanales llevarlas a treinta y cinco, ello haría que la gente tuviera mas tiempo para tener a su disposición y poder destinarlo a esparcimiento, educación, realizar eventos sociales, etc., dicho proyecto del ejecutivo se llevo al congreso alemán, parecía que el mismo sería aprobado puesto tenia gran consenso entre la gente, entonces el presidente de la multinacional alemana “Siemens” en una audiencia solicitada al canciller alemán le dijo que si prosperaba la iniciativa de reducción de horas laborales daría la orden personalmente de que la empresa se trasladara a otro país, quedando sin trabajo muchos obreros y profesionales de dicha empresa, lo asombroso es que la propuesta presentada no fue rechazada fue retirada por el mismo ejecutivo, sin ser tratada. Así funciona el sistema de la macropolítica mundial. Ningún país puede hacerle frente, es más poderoso que los mismos estados.
Y así llegamos al médico peruano Carlos Mario Ozcuna Yerta, él piensa que cada vez esta mas cerca el día en que el médico deje el delantal blanco para ponerse el overol de mecánico. La pregunta es: ¿se llegara a eso?